El uso de la miel para la curación ha sido una práctica durante más de 5.000 años, desde los antiguos griegos hasta los remedios caseros modernos.
Con aceite de coco, reparan y protegen la piel para aumentar su longevidad.
Esta fórmula rica y cremosa también está fortificada con una mezcla exótica de aceite de argán orgánico certificado y extracto de manteca de karité para dejar tu piel sedosa y suave al tacto.
Sin conservantes agresivos, parabenos ni transgénicos
